Los hámsteres son una excelente adición a cualquier familia y tienen la ventaja sobre algunos de nuestros otros amigos peludos de tener un impacto relativamente bajo en la casa. Con la multitud de suministros de hámster disponibles, sin embargo, antes de traer a un nuevo hámster al hogar, hay algunos pasos importantes que deberás tomar y el primero de ellos es preparar correctamente la propia residencia de tu hámster.
Hay dos factores principales que pueden influir en tu elección de jaula; la cantidad de espacio que tienes disponible y el tamaño de tu hámster en la edad adulta. Los hámsteres son animales muy pequeños y pueden ser una opción eficiente con el espacio; sin embargo, es de vital importancia permitirle suficiente espacio para que tu hámster pueda hacer ejercicio y anidar.
Puedes optar por una jaula de hámster de hilo tradicional, o una de las casas de plástico resistente. Ahora existen múltiples opciones de habitad, y los diseños de plástico a menudo incorporan el uso de colores, así como redes de tubos para que tu hámster juegue. La consideración más importante al elegir una residencia para tu hámster es la seguridad. Asegúrate de seleccionar una casa bien hecha, libre de bordes afilados, también es vital asegurarse de que la jaula es fuerte, de forma que no puedan escapar (un pasatiempo popular en los hámsteres). Elije un lugar tranquilo para la morada de tu hámster, donde sea probable que exista una temperatura moderada y sea poco probable que te moleste por la noche. Aunque los hámsteres pueden ser activos durante el día, son animales principalmente nocturnos y no vas a querer estar despierto en la noche por el sonido de Lamy, que gira en su rueda.
A continuación, prepara la ropa de cama para la jaula. Debes ser capaz de encontrar ropa de cama de estilo de papel picado en la mayoría de las tiendas de mascotas, que suelen ser la opción más barata y más segura. Nunca caigas en la tentación de usar la ropa de cama de algodón, ya que esta puede enredarse en las patas de tu hámster y ser muy peligrosa. Use un par de pulgadas de ropa de cama en la parte inferior de la jaula. El hámster la utilizará para la nidación, así como para ocultar la comida,
Los hámsteres tienden a seleccionar un área de su espacio de vida para su uso como un inodoro. Por lo tanto, tendrás que limpiar esta zona cada día y quitar y reemplazar la ropa de cama húmeda. Además debe proporcionarle a la jaula y a todos los juguetes en su interior una limpieza completa usando desinfectante una vez cada semana.
Finalmente, estás listo para equipar a la casa de tu hámster. Además de juguetes, tales como balancines y tubos que le mantendrán entretenido y le darán un lugar para esconderse, tu mascota debe tener acceso a los alimentos y el agua. Puedes optar por utilizar dispensadores fijos a un lado de la jaula para ello, o bien optar por usar tazones. Cualquier cuenco usado debe ser poco profundo, para evitar que tu mascota se quede dentro de ellos y potencialmente pueda ahogarse. También vale la pena seleccionar cuencos de cerámica o de metal para que tu hámster no gaste todo su tiempo mascando en ellos, en lugar de hacerlo en los juguetes que has elegido para ello.